El tiempo cada vez corre más, ¡¿o me lo parece a mi?! El 2019 comenzó de lo más viajero y una gran noticia nos hizo hacer un pequeño parón… nuestro peque viajero hace solo unos días que nació, así que con el embarazo hemos tenido que frenar los planes viajeros del año, pero solo frenarlos ¿eh? ¡que también hemos hecho cosillas a lo largo del año!
Y como ya es tradición, ahí va un nuevo resumen anual. Por cierto, en 2019 el blog cumplió
¡¡5 años!!
Comenzamos el año de lo más viajeros, después de la gran experiencia que fue visitar Budapest en enero del 2017, decidimos repetir destino europeo con frío. De manera que a 1 de enero estábamos comprando vuelos para irnos unos días a finales de mes a Viena. Fueron 4 días/3 noches en la capital de Austria recorriendo sus bonitos Palacios, su Ópera, su Biblioteca, sus parques, sus iglesias y disfrutando de su gastronomía bajo un frío tremendo. Aún así, de nuevo nos encantó la experiencia y seguro que repetiremos esto de viajar abrigados 🙂
Seguimos en enero y viendo que me quedaban un par de días de vacaciones por gastar y que podía coincidir fechas con mi mejor amiga, decidí ir a hacerle una visita a París. Así que 3 días después de llegar de Viena, me volví a subir a un avión bajo una ola de frío polar con rumbo a París. Disfruté de un finde largo con mi amiga redescubriendo París y pasando un día como niñas en Disneyland.
Casi de un día para otro me ofrecieron en el trabajo ir a una Jornada científica a Madrid con los gastos pagados, ¿y quién dice que no a eso? Pues venga, escapada súper exprés de 1 noche a la capital del reino. Fui con el AVE directo, y como quien sale a dar un paseo, en 2h y media me planté en Madrid.
Me alojaron en pleno Paseo del Prado, a pocos metros de la estación de Atocha, mejor imposible. La Jornada tenía lugar en el Espacio SOLO, junto a la Puerta de Alcalá. Un museo de arte contemporáneo de lo más curioso que pudimos visitar en los descansos de la Jornada. Lugar muy recomendable si visitáis la ciudad. Por supuesto, aproveché para dar un pequeño paseo por el Paseo del Prado, parte del Paseo de Recoletos, Cibeles y Calle de Alcalá. Escasas horas en la ciudad que me hicieron recordar anteriores visitas y que me animan a querer hacer una nueva escapada en breve.
Llegó la primavera y compramos vuelos para la siguiente escapada en la que vamos a celebrar nuestro aniversario de boda, nos vamos a Florencia y Pisa. Y casi a la vez, descubrimos que ¡estaba embarazada! Así que finalmente esa escapada fue de doble celebración 🙂 Volvimos de nuevo la bella Italia en el mes de mayo, embarazada de 3 meses y pudimos disfrutar a tope del gran patrimonio cultural de Florencia y Pisa. ¿Quién dijo que embarazada no se puede viajar? Yo os digo que si te encuentras bien, se puede 🙂
Con el verano, decidimos aprovechar que el embarazo me sienta fenomenal y nos montamos una mini-escapada al sur de Francia. Visitamos la región del Languedoc-Roussillon, también conocida como la Catalunya Nord (Cataluña Norte). La conocíamos mínimamente de una escapada en 2012 a Argéles-Sur-Mer y esta vez decidimos dormir en Saint Cyprien.
Encontramos un hotel con una excelente ubicación en el puerto deportivo de la ciudad. Rrodeado de tiendas y restaurantes, y junto a una de las mejores playas de la zona por muy buen precio. Viajamos con nuestro coche y aprovechamos para hacer ruta por la zona. En esos 4 días/3 noches, disfrutamos de las playas y del ambiente de Saint Cyprien.
Visitamos la ciudad de Perpiñán, el Castillo de Quéribus y Collioure. Intentamos visitar también el castillo de Peyrepertuse pero las condiciones climáticas del día no nos lo permitieron. Habrá que volver porqué desde la base ¡tiene una pinta tremenda! Tengo pendiente hablaros de esta escapada. Espero no tardar mucho porque es una zona que nos queda cerquita de casa y que ofrece muchas opciones para parejas y familias.
Nuestra idea inicial era hacer algún viaje de relax en agosto, antes de cumplir demasiadas semanas de embarazo y que no me dejaran volar. Pero tuvimos que solucionar un problema en casa y meternos de nuevo en obras y esos planes se nos fueron al garete. Igualmente, en septiembre y aprovechando que mi marido tenía unos días de vacaciones, decidimos hacer un poco de relax.
Como el embarazo estaba bastante avanzado ya y era de riesgo, decidimos quedarnos «cerca» de casa. Mis padres hace años que tienen un mobil home en un camping en la Costa Daurada (Tarragona) y decidimos aprovecharlo. Pasamos 4 noches allí, y aprovechamos para recorrer esa zona que tanto me gusta. Visitamos Mont-Roig del Camp y Hospitalet de l’Infant. Y aprovechamos para hacer mucho tumbing y mucho panching en la playa y cargar pilas.
Los que me conocéis, sabéis que nos cuesta quedarnos los findes en casa… de modo que los hemos ido aprovechando para visitar la Masia Freixa en Terrassa, la Ermita de la Mare de Déu de Montferri, y las bonitas ciudades medievales de Pals y Begur. También hemos hecho caminatas varias por el Parque Natural del Montseny, la última con una barriga de 7 meses para llegar al Turó de l’Home con una altitud de 1712 metros. Tendríais que ver la cara de la gente que nos cruzábamos al ver mi barrigota…
Y como siempre, hemos hecho varias visitas al Palo Alto Market en Barcelona. También conocimos al fin el Palau de la Generalitat, el Parlament de Catalunya y el Templo Romano de Barcelona. Regresamos al castillo de Montjuïc después de muchos años. Y descubrimos el Museo de la aeronáutica del Prat. Así como montones de paseos a pie por la ciudad, findes de camping, partidos de baloncestos en el estadio Blaugrana, tardes en la playa o viendo aterrizar aviones en El Prat…
Pero sin duda la mejor experiencia del 2019 ha sido la llegada de nuestro peque viajero este mes de diciembre. Ha valido mucho la pena el parón viajero del último trimestre del año 😉
Y así, casi sin darnos cuenta, hemos cerrado el 2019. Otro año cargado de grandes momentos, de experiencias, de vivencias, de cargarnos de recuerdos que nos acompañarán siempre. De vivir la vida e intentar disfrutarla al máximo. De estar con los nuestros, de valorar todo lo que nos da la vida… ¿y el 2020? Pues ya nos rondan muchas ideas por la cabeza pero primero toca coger el ritmo con el peque y adaptarnos a esta nueva etapa vital. Aunque ya estamos deseando poder comenzar a crecer viajando con él.
Y como siempre, al año que acaba de empezar sólo le pido poder seguir con buena salud. Disfrutar de los nuestros, de los pequeños y grandes momentos. De continuar conociendo rinconcitos de este gran mundo y podérselos enseñar a nuestro peque viajero. De conocer gente, compartir y sobretodo, disfrutar de la gran oportunidad de vivir, la que nos ayuda a seguir Creciendo con mis viajes 😉