23/09/2015 (día 5): visitamos a Miss Liberty, Wall Street y sus lugares más emblemáticos, el 9/11 Memorial, subimos a lo más alto del The One y cruzamos el Brooklyn Bridge…
Nos levantamos a las 8h, desayunamos unos pocos cupcakes que nos quedan y nos ponemos en marcha. Hoy vamos a conocer a ¡Miss Liberty! Después recorreremos las calles de Wall Street; subiremos al punto más alto en la ciudad, el mirador The One y al atardecer, cruzaremos el puente más famoso de la ciudad, el Brooklyn Bridge 🙂
Tomamos la línea 1 (roja) en la estación de Times Sq hasta la parada South Ferry.
NOTA: es importante colocarse en los primeros 5 vagones ya que la estación de South Ferry es pequeña y curva y solo hay cabida para esos vagones. Lo avisan por megafonía cuando entra el tren en las estaciones, y además hay una marca roja junto a las puertas de éstos.
Junto a nosotros van un grupo de estudiantes italianos que están de viaje en la ciudad con sus profes… una de las profesoras al oírnos hablar español nos da conversación. Medio en inglés, medio en italiano 😛 ¡Cómo me gustan esos momentos de intercambio viajero!
Son las 9,30h cuando llegamos a la parada de South Ferry y nos dirigimos hacia el Fort Clinton. Dónde están las taquillas para el ferry. Recordad que la visita de hoy la incluimos en el NYC Explorer Pass. Así que ahora, solo tenemos que intercambiar el pase por el ticket. Es mucho más rápido porque la cola es distinta y todo es más ágil.
De allí, nos dirigimos hacia el muelle en el Battery Park. Disfrutamos de las vistas desde aquí…
Los americanos son bastante neuróticos para la seguridad, así que tras una larga cola pasamos un control seguridad igual de estricto que el de un aeropuerto. Y al fin, subimos al primer ferry que sale. Cogemos sitio junto a un ventanal que queda cerca de la popa del barco. Así podemos disfrutar del fabuloso skyline de la ciudad… el recién estrenado gran angular me es de gran ayuda para tomar unas instantáneas de las vistas 🙂
Son las 10.30h cuando al fin llegamos a la Liberty Island. La mayoría de la gente se va directa a la zona dónde se ubica la archiconocida estatua.
Pero nosotros preferimos recorrer la isla y disfrutar también de las vistas del skyline de NYC y New Jersey que hay desde aquí, de los habitantes de la isla y del muelle…
Y tras todo ello, ahora si, nos dirigimos a los pies de Miss Liberty, la estatua más famosa del planeta… tras haber visto las que hay en Paris y en Tokyo, al fin disfrutamos de la «original» 🙂
La estatua, realizada en láminas de cobre, tiene una altura de 46 metros y medio. Añadiendo el pedestal sobre el que reposa, llega hasta los 93 metros.
Se alza cargada de simbolismos. El más evidente y la razón principal por la que se creó, aparece en forma de inscripción sobre la tabla de su mano izquierda: «July IV MDCCLXXVI» (4 de Julio de 1776). Fecha de la firma de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos.
Además, pisa con su pie derecho unas cadenas, en clara referencia a la ruptura de opresiones. Las 25 ventanas del mirador de la corona representan los minerales naturales de la Tierra. Y los 7 rayos que salen de ella tienen que ver con los 7 grandes mares o los 7 continentes. El punto más alto del monumento es la antorcha chapada en oro. La que vemos no es la original, y simboliza la luz que marca el camino hacia la libertad.
Aunque se la conoce como la Estatua de la Libertad, su verdadero nombre es «la libertad iluminando el mundo». Y a pesar de ser considerada un símbolo americano, fue un regalo de los franceses en 1886. Conmemorando el centenario de la Declaración de Independencia de los USA y como signo de amistad entre naciones.
Después de más o menos una hora en la isla, decidimos coger el ferry… y dirigirnos a Ellis Island. Esta pequeña isla, era el punto de llegada de los inmigrantes procedentes de Europa y África. Aquí debían pasar los controles de aduanas e inmigración. En los 90 crearon el Museo de la Inmigración, como homenaje a todas aquellas personas.
Pero para nuestra sorpresa tenemos que hacer una hora de cola mientras esperamos a que el ferry que llega desembarque y embarque… Después de tanta espera, y viendo que la mayor parte de la gente que sube a bordo se dirige a Ellis Island, se nos pasan las ganas de ir bajar. Si los hacemos, nos volverá a ocurrir lo mismo…. Y es que en Ellis estamos más de 30 minutos parados esperando a que baje y suba la gente… ¡uff! Creo que lo tienen muy mal montado. Teniendo en cuenta la cantidad de turistas que van a ambas islas, deberían disponer de más ferris.
¡Son más de las 13,30h cuando conseguimos llegar de vuelta a Battery Park! Qué locura… Vemos en el parque el East Coast Memorial. Compuesto por 8 bloques de hormigón de casi 6 metros de altura. En ellos, constan los nombres de más de 4.500 soldados que perdieron la vida en el mar. Además de su rango, rama militar y estado de origen. En el centro un águila con una corona de laurel sobre una ola que simboliza la muerte en el mar.
También vemos el memorial de la Llama Eterna en honor a los muertos en el trágico 11-S. Seguimos camiando hacia Wall Street.
Seguimos caminando hacia el Bowling Green Park dónde se encuentra el Charging Bull, el toro de Wall Street. Que simboliza el optimismo, la agresividad y la prosperidad financiera de esta zona de la ciudad. Fue creada por Arturo Di Modica tras la crisis bursátil de 1987. Se hace difícil acercarse a ella ya que está rodeada de turistas, así que nos conformamos con verla en la distancia.
Avanzamos por New Street hasta el cruce con la Wall Street, dónde se encuentra el edificio de la NY Stock Exchange. Una de las bolsas más conocidas del planeta. Nos hace especial ilusión ver el edificio, aunque sea por fuera (no se puede acceder fácilmente al interior) 😛
A muy pocos pasos, encontramos el Federal Hall. Construido en 1700 como primer ayuntamiento, y convertido en edificio federal en 1789. Fue el lugar donde George Washington fue nombrado primer presidente de los Estados Unidos. Utilizado como Capitolio durante sólo un año. Ya que, cuando Filadelfia se convirtió en capital provisional de EEUU, el edificio volvió a ejercer su función de ayuntamiento. Hasta 1812, año en que fue demolido.
Aunque el edificio actual no es el original, fue declarado Monumento Nacional en 1939 y es tal vez el edificio clásico mejor conservado de Nueva York. Alberga un pequeño museo que narra la historia del edificio. Y contiene algunos importantes objetos como la biblia sobre la que juró G. Washington. El edificio también cuenta con un pequeño centro de información turística. En la entrada principal del edificio se encuentra una estatua del 1r presidente, George Washington.
Pasamos frente al Banco de la Reserva Federal. Se puede entrar en alguna sala principal, pero para ver los lingotes de oro hay que reservar con muchísima antelación y pagar el tour guiado. Nosotros no llegamos a tiempo, recordad que planificamos el viaje con menos de 3 semanas de antelación. Así que nos conformamos con la vista desde fuera.
Seguimos caminando por Wall St. hasta el cruce con Broadway Ave. dónde se encuentra la Trinity Church. Construida en 1846 por Richard Upjohn. Era uno de los edificios más altos del sur de la ciudad y servía como «faro» a los barcos que llegaban a Battery Park. No podemos entrar ya que es tarde y han cerrado…
Son algo más de las 14h cuando hambrientos, entramos en un McDonalds. Tenemos muchos planes aún y queremos «finiquitar» la comida en plan rápido… Tomamos dos menús (13$) y cumplimos con nuestra tradición viajera de «Mc Donalds por el mundo» 😛 Recordad que en todos nuestros viajes hacemos siempre una parada en un restaurante de la cadena para confirmar que estés dónde estés, los BigMc siempre son iguales (excepto en China) 🙂
Tras la comida, y un breve descanso de tanta caminata, nos dirigimos hacia la St Paul’s Chapel. Pero también la encontramos cerrada… Inaugurada en 1766, esta iglesia es el edificio público más antiguo de Manhattan aún en uso.
A pesar de la cercanía al World Trade Center, quedó intacta tras el derrumbe de las torres gemelas. Por ello fue punto de peregrinación de voluntarios y afectados. La rodeamos y vemos su cementerio desde la verja.
Desde aquí ya vemos el One, el edificio más alto que hay actualmente en New York . Construido como homenaje a las desaparecidas Torres Gemelas. La idea es construir un complejo de varios edificios, cada uno de ellos numerado, que rodeen el espacio que dejó el antiguo World Trade Center. Y hacia allá es a dónde nos dirigimos…
De camino nos topamos también con Oculus, a estación de tren/metro que está construyendo el arquitecto español Santiago Calatrava. Considerada como la estación de metro más cara de la historia de la ciudad. Espera que vean la calidad de las construcciones de Don Calatrava… ¬¬’ Comentar que la estación se inauguró en marzo de 2016, así que actualmente es visitable 😉
Caminamos entre altos edificios y obras, hasta llegar al 9/11 Memorial y las dos enormes piscinas que cubren la base las Torres Gemelas. Construidas en 2011 como monumento en memoria a las victimas de los atentados del 11S en el World Trade Center.
Realmente se ponen los pelos de punta al pensar lo que toda aquella gente debió sufrir en ese momento. Y recuerdo mi mal cuerpo de aquel día, cuando vi en directo en las noticias de las 15h la caída de las torres. Aún se me ponen los pelos de punta. Creo que jamás se sabrá toda la verdad sobre lo ocurrido aquél día. Si realmente fue un atentado o fue una jugada del gobierno para tener una excusa para ir a la guerra a oriente medio… Lo que si sé es que muchos sufrieron las consecuencias de aquel acto… y sus nombres están escritos en los bordes de las piscinas.
Este lugar me genera sentimientos contradictorios. Por un lado acongoje al pensar lo que representan las piscinas. Y por otro, admiración al mirar alrededor y hacia arriba y ver los altos rascacielos…
Nos dirigimos hacia el One World Observatory, no queremos irnos de la ciudad sin subir a todos sus miradores y el más alto no iba a ser menos. Pagamos 32$ cada uno y vamos hacia los controles de seguridad.
Aquí me pasa algo curioso y es que la militar que me inspecciona el bolso me dice que le gusta mucho y me pregunta dónde lo he comprado… Cuando le digo que en una tienda en Barcelona, ¡alucina un montón! 😀 Le explico que soy de Barcelona y que estoy de visita en la ciudad. Y me responde que me había confundido por una neoyorquina.
No sé qué tengo, pero esto me ocurre a menudo cuando viajo. Por Europa, siempre me para la gente a preguntarme indicaciones… ¿será que no tengo pinta de ser de ningún sitio en concreto, y simplemente soy una ciudadana del mundo? 😉
Tras la curiosa conversación con la militar, accedemos al ascensor que te lleva a lo más alto y aunque ya íbamos advertidos, ¡alucinamos con el montaje que tienen aquí!
Al llegar arriba, ponen de nuevo un audiovisual sobre los grandes iconos de la ciudad…
Comúnmente conocida como la Freedom Tower, el edificio fue inaugurado el 3 de noviembre de 2014. Alcanza una altura total de 541 metros, que equivalen a 1.776 pies. Cifra simbólica ya que es el año de la Declaración de Independencia de los EEUU. Durante una hora recorremos los grandes ventanales que ofrecen una vista de 360º sobre la ciudad desde el piso 94.
Desde aquí tenemos unas vistas privilegiadas de todos los distritos de la ciudad. De la Liberty Island, de los puentes más famosos, del resto de rascacielos y de las grandes avenidas…
Tras una hora y algo aquí arriba, decidimos bajar… de nuevo alucinamos con el ascensor 🙂
Una vez abajo, echamos un último vistazo hacia arriba y seguimos recorriendo las calles del distrito sur de Manhattan.
A eso de las 16,45h paramos un momento en un Starbucks a tomar un par de cafés (7$). Después proseguimos la caminata hacia el puente de Brooklyn. Pasamos frente al edificio del Ayuntamiento de Nueva York.
Sobre las 17h, y antes de que caiga el sol, nos disponemos a cruzar el puente más famoso de la ciudad, el Brooklyn Bridge. Que une los distritos de Manhattan y Brooklyn.
Diseñado por Roebling, y construido entre 1870 y 1883, con 1.825 metros de largo y una luz entre pilares de 486.3m. Fue el puente colgante más grande del mundo hasta 1889. Y considerado todo un pionero en la ingeniería al usar grandes cables de acero para su sostén por primera vez en la historia.
Mientras cruzamos hacia el otro lado sobre el East River, disfrutamos de ese cableado.
Y de las grandes estructuras que forman sus pilares y de las fabulosas vistas hacia el skyline de la ciudad…
Tardamos unos 30 minutos en recorrerlo de punta a punta. Llegamos al mirador Dumbo situado entre los puentes de Brooklyn y de Manhattan.
Y allí vemos caer el sol… disfrutamos de otra de las puestas de sol más bonitas de este viaje 🙂
Estamos agotados tras una largo día de caminata. Y aunque sabemos que las vistas del skyline iluminado deben ser brutales, decidimos volver al apartamento. Sobre las 18,30h, cogemos el metro en la estación York, línea F hasta W4 St, dónde cambiamos a la línea A hasta 42-PABT.
Pasamos por el supermercado que tenemos frente al apartamento a comprar comida (32$). Nos damos una buena ducha y luego nos relajamos en el apartamento. Cenamos un delicioso solomillo, acompañado por fideos y arroz. Realmente la carne en EEUU está deliciosa.
Hoy el día ha cundido y hemos visitado lugares que nos hacían especial ilusión… Más contentos que unos niños con zapatos nuevos, nos vamos a dormir pronto. Estamos ko y aún nos quedan días por delante en esta fabulosa ciudad 🙂