19/11/2015 (día 2): nuevo día en HK en el que descubrimos los rincones que esconde la península de Kwoloon
Nos levantamos muertos de sueño a las 8,30h. La idea para hoy es recorrer Kwoloon. La noche ha sido divertida.. A las 3h me desvelé y estuve un par de horas mirando cosillas por internet sin nada de sueño intentando cogerlo de nuevo. Y lo mismo le pasó a mi marido a las 5h… Si algo odio de viajar tan lejos es el jet-lag al cual soy súper sensible… 🙁
Tenemos desayuno buffet incluido, así que subimos al restaurante a ver si cargamos un poco las pilas. Después, cogemos los bártulos y nos ponemos en marcha. Bajamos al metro de Jordan y lo cogemos hasta la parada de Prince Edward, situada en el barrio de Mong Kok.
Barrio comercial y residencial, es la área más densamente poblada de HK y una de las más densas del mundo. Sus antiguas calles repletas de luces de neón, sus tiendas y el ir y venir de la gente, la convierten en una zona cargada de encanto y en una de las más animadas de la ciudad. Repleta de gente a todas horas es ideal para pasear, cenar o compras. Aquí las tiendas se encuentran agrupadas en función de los productos que ofrecen, de manera que se pueden encontrar grandes mercados y calles especializadas.
Caminamos un par de calles hasta el Flowers Market. Una calle repleta de tiendas de plantas, flores y accesorios de jardinería. Tienen plantas chulísimas, pero veo difícil llevarme una planta para casa en la maleta 😛
Seguimos la calle hasta toparnos con el Mercado de los Pájaros. Cuatro puestos con pajarillos y cosas necesarias para su cuidado… No caminamos ni 10 metros que damos la vuelta. No aporta nada, ni hay pájaros que no encuentres en cualquier otro sitio. Nada que ver con el que vimos en Yogyakarta el año pasado.
Desandamos lo andado hasta volver a la misma parada de metro. Aprovechamos que hay WC gratis y limpios para hacer una parada en boxes. Y compramos una bebida isotonica en un combini (11HKD) que pagamos con la Octopus. ¡¿Porqué no hay algo así ya en Barcelona con lo cómodas que son?!
De allí vamos a la parada de metro Mon Kok para ir a ver el Ladies Market. Pero nuestro gozo en un pozo porque lo empiezan a montar ahora… Así que bajamos caminando por Nathan Rd mientras alucinamos con los grandes carteles que anuncian todo tipo de cosas.
Algo que nos llama muchísimo la atención de la ciudad es el contraste entre los altos edificios nuevos y los cochambrosos… creo que esos contrastes fueron lo que más nos gustó de Hong Kong.
Cuando llegamos a la altura de la siguiente parada de metro entramos para ir hacia el siguiente punto del día.
El metro en Hong Kong es una pasada. Hay aire acondicionado en las estaciones. Todas cuentan con escaleras mecánicas y la profundidad de algunas estaciones es abrumadora. Cuenta con un sistema de seguridad para evitar caer a las vías y realmente se agradece ya que en hora punta hay ordas de gente, literalmente, y sería peligroso de no haberlas. Se abren y cierran a la señal acústica del tren y con mala baba, ¡vigilad no os pillen!
Como os decía, en las horas puntas el metro es imposible… en más de una ocasión nos encontramos con tener que esperar hasta 3 trenes para poder subir a bordo… y ¡bien apretaditos! Estoy totalmente convencida que el dicho «ir como sardinas en lata» lo inventó un chino 😛 Lo bueno es que los trenes pasan a cada minuto y cogen velocidad, así que irás de una punta a otra de la ciudad en muy poco tiempo.
Sobre las puertas tenéis el trayecto del metro y el sentido. Normalmente en aquellas estaciones en las que se cruzan líneas, puedes hacer el trasbordo en el mismo andén, por lo que se hacen super rápido 🙂
Como os iba explicando, nos dirigimos a la estación de Tsim Sha Tsui.
Localizada al sur de la península de Kowloon, es una de las zonas más populares y prósperas de la ciudad. Es el lugar para disfrutar de las vistas de la bahía de Hong Kong.
Salimos hacia el Promenade para ver la bahía de Victoria Harbour de día. ¡Qué diferente es de día respecto a la noche!
El día antes de partir hacia acá vi que acababan de cerrar el Paseo de las Estrellas y que no vuelven a abrirlo hasta bien entrado 2016… Una pena porque nos hacía gracia verlo. Vemos que están construyendo un edificio enorme justo al lado y debe ser por ello. Por suerte la estatua que yo quería ver está en el Garden the Stars… Un pequeño parque elevado que hay justo al lado de dónde empieza el paseo…
Subimos hacia allá y enseguida vemos al gran maestro Bruce Lee.
Vemos que han traído hasta aquí algunas esculturas del Paseo de las Estrellas. Hay huellas de las manos de famosos hongkoneses y recorremos parte del parque hasta llegar de nuevo a la zona de Nathan Rd.
Caminamos por Nathan Rd y entramos en el Centro Comercial iSquare. Damos una vuelta y vemos que hay varios sitios dónde comer por aquí.
Seguimos caminando la calle abajo y nos adentramos en el Kowloon Park, pero solo unos pasos porque el parque nos parece bastante anodino y hace un calor tremendo a estas horas del día como para andar por él. Hay una mezquita a la que sólo puedes entrar si eres musulman. Y tampoco podemos ver por fuera porque están remodelando la fachada y está cubierta de andamios.
Decidimos que ha llegado el momento de parar un poco. Nos decidimos por entrar a un Pizza Hut que nos queda a mano. Es curioso porque aquí esta cadena de comida rápida resulta ser de ¡alto standing! Incluso desentonamos con nuestras pintas de turistas… Alucinamos. Comemos un par de pizzas con unos refrescos que nos saben a gloria (376HKD).
Tras la comida, entramos al metro y sobre las 14.30h llegamos de nuevo al hotel. Entre el poco dormir y la caminata, nos hemos ganado una ducha y una siesta 😛
Nos levantamos a las 17,30h y volvemos a probar suerte con los mercados. Cogemos el metro hasta Sham Shui y recorremos la calle que conforma el Geek Market. En este mercado venden gadgets tipo palos de selfie, pilas, auriculares y fundas de móvil… esperábamos ver más tecnología, tal como anunciaba la web de turismo de la ciudad.
Volvemos al metro y nos bajamos en Mon Kok de nuevo. Esta vez sí podemos recorrer el Ladies Market. Pero no compramos nada, todo son baratijas e imitaciones malas.
Bajamos caminando por el mercado primero y por Nathan Rd después hasta toparnos con Temple Street Market. Esta vez lo recorremos desde su inicio a la altura de Portland St. Vamos bajando entre puestos de todo tipo hasta llegar a Jordan St. Aquí tampoco compramos nada. Estamos tan cansados que ni nos apetece rebuscar ni regatear.
Son algo más de las 20h y no vemos un sitio claro dónde entrar a cenar. Además estamos realmente agotados entre la caminata de hoy y el jet lag. Así que tras sacar algo de dinero de un cajero, decidimos volver al hotel y cenar en su restaurante. Tomamos un platazo de deliciosos noodles al estilo hongkonés con dos refrescos (278HKD).
Bajamos a la habitación, hago copia de seguridad de las fotos, ducha y a ¡dormir que estamos agotados!