Ando algo dubitativa desde hace unos días de si escribir esta entrada o no… La situación del COVID a nivel mundial vuelve a empeorar con la llegada del frío y una nueva variante . De modo que muchos países están cerrando sus puertas de nuevo. Aún así, por aquí mantenemos la ilusión de poder volver a viajar. Y si todo va bien, en poquitos días será el 2º cumpleaños del peque y nos hace ilusión anunciar que volvemos a Disneyland París para ¡celebrar su cumpleaños!
¡Volvemos a Disneyland Paris para celebrar el cumpleaños del peque!
Si habéis leído nuestras anteriores visitas, sabréis que la última vez que estuve me prometí que si tenía un peque, ¡iríamos a celebrar algún cumpleaños a Disney! De hecho me quedé embarazada poco después, así que no podía fallar a la promesa.
Además, mi mejor amiga de toda la vida trabaja en el City Hall del parque. De modo que tenemos muchas facilidades para visitar el parque siempre que queremos, lo que le añade un súper plus. Y para añadirle emoción a la cosa, ya está la decoración navideña y están a punto de celebrar su 30 aniversario. ¡Así que seguro que está más bonito que nunca!
Como en cada viaje que hacemos, comenzamos por la clásica entrada en la que os contamos…
Los preparativos del viaje:
Este viaje será muy diferente a los 3 anteriores hechos a París. Para empezar no iremos en avión si no en tren. Viajamos para el puente de diciembre y los precios de los vuelos estaban imposibles (la compañía más barata 1700€ los 3 con horarios espantosos). Miramos el tren y aquí de nuevo, a jugar entre compañías… y es que no son iguales los precios comprando con RENFE que con SNFC. Nos decantamos por comprar a través de la compañía francesa.
Y el segundo «juego» fue comparar qué era mejor, si hacer el tren directo de Barcelona a París, y luego allí movernos con el RER hasta la zona del parque. O bien, hacer una parada intermedia y llegar directamente a la estación de alta velocidad del parque. De nuevo, nos decantamos por esta opción. Comparamos precios y tiempos y apenas había diferencia pero ganábamos en comodidad. Así que finalmente, haremos Barcelona – Nîmes – Marné la Vallée-Chessy a la ida, y Marné la Vallée-Chessy – Lyon – Barcelona a la vuelta. Compramos asientos para el peque también porque son 7h de viaje en cada trayecto (+30 minutos para el cambio de tren). Todo ello nos cuesta 647€.
El siguiente paso fue avisar a mi amiga que en seguida nos reservó las entradas gratis para todos los días de nuestra estancia. Y le pedí que reservara restaurante y pastel para el día del cumple del peque. Así soplaremos las velas juntos y esperemos que acompañados por algún personaje 😀
Miramos los hoteles del parque para el alojamiento pero no nos acababa de convencer. El hecho de ir de hotel nos obliga a hacer todas las comidas en restaurantes. El comer no es el punto fuerte del peque todavía, así que preferimos un apartamento donde poder organizarnos sin desmontarle en exceso las rutinas. Miré en diferentes plataformas y finalmente, nos decantamos por un apartamento a través de Airbnb de nuevo.
El apartamento está ubicado súper bien, a 300m de la parada del RER Val d’Europe y junto a un enorme centro comercial, tiendas, restaurantes, etc. Además, está a 1 parada en RER del parque, 15 minutos en bus y unos 20 minutos a pie. Así que nada mal. El anfitrión es muy atento y responde en seguida, de hecho tiene puntuación de súper anfitrión y el alojamiento cuenta con 5* en las puntuaciones. Está totalmente equipado y además nos deja una cuna y una trona para el peque. 3 noches/4 días nos cuesta 344€. A la vuelta, ¡os cuento más detalles!
La situación es la que es, y aunque cuando viajábamos por Europa no solíamos contratar seguro, esta vez no quisimos jugárnosla. De modo, que usando el descuento que tenemos en el blog, contratamos el seguro de viaje + cancelación (incluye casuísticas Covid) de IATI por 35€. De nuevo, esperamos no tener que usarlo pero preferimos viajar seguros. Además, ya tenemos descargados nuestros certificados de vacunación y los pasaportes Covid para poder acceder al país. Y llevamos con nosotros 3 las tarjetas sanitarias europeas por si hiciera falta más allá del seguro.
Esta vez la idea es centrarnos en Disney. Y si tenemos tiempo y el clima lo permite, acercarnos algún rato a la ciudad de la luz, una de mis favoritas en Europa. En ese caso, será mi 4ª vez en París. Y tal y como escribo estas palabras, me viene a la cabeza que París fue el 1r viaje que hicimos juntos como pareja al extranjero. Y también será el 1º con el peque fuera de España. ¡Qué causalidades nos depara la vida a veces! La verdad es que hasta este mismo momento, no era consciente de ello 😀
Como os decía, no haremos planes de qué ver en París porque iremos sobre la marcha. Y en todo caso, sería acercarnos a ver de nuevo los clásicos de la ciudad. De modo que a la vuelta, más detalles 😉
Si que hemos echado un vistazo a las diferentes atracciones del parque, para tener un poco de idea de cuáles son las que podremos disfrutar con el peque. ¡Ganas mil de estar allí los 3!
Y ahora, sólo queda cruzar los dedos para poder hacer el viaje según tenemos planeado. Y esperar que no haga un frío excesivo (iremos cargados de ropa térmica y de abrigo). Queremos poder celebrar un cumpleaños de lo más mágico con nuestro bichito, que este año ¡nos lo hemos ganado!
¿Te vienes una vez más con nosotros de viaje y a seguir Creciendo con mis viajes?
Nota post-viaje:
Lamentablemente, este viaje tuvo que ser cancelado al día siguiente de llegar a París, ya que el peque se puso enfermo, y el seguro de viajes IATI no nos dio respuesta. Nos dijeron que el seguro no cubría la asistencia por un pediatra y que fuéramos a un hospital público (como si no tuviéramos seguro). Y luego procediéramos al reembolso de los costes a través de la Seguridad Social. Las opiniones sobre la asistencia pediátrica en el hospital más cercano eran pésimas, y no teníamos ningún centro privado cerca.
Así que tomamos la decisión, de volver antes de tiempo. IATI Seguros no se hizo cargo tampoco de la cancelación del viaje. Así que nos tocó asumir con los costes (perdimos noches de alojamiento, los trenes de vuelta y el coste de los vuelos anticipados).
Un desastre, vaya. Tocará compensar al peque y regresar en otro momento.