23/11/2015 (día 6): recorremos la cercana isla de Cheung Chau y ultimamos las compras en Temple Street en nuestro último día en Hong Kong
Hoy es nuestro último día completo en Hong Kong. Los días nos han pasado volando y hemos disfrutado muchísimo del destino. El plan para hoy es un día tranquilo. Visitaremos la cercana isla de Cheung Chau y ultimaremos compras en Temple Street.
Nos levantamos tranquilamente a las 9,30h y vamos a desayunar al bufet del hotel. La idea para hoy era ir a visitar el cercano país de Macau. Pero mirando información anoche, vimos que el precio del ferry es alto. Y salvo un par de monumentos, tampoco tiene gran cosa más allá de los casinos y centros de ocio. Así que buscamos una alternativa para hoy y, salimos a la aventura…
Cogemos el metro hasta la parada de Central y de allí vamos caminando hasta la zona de muelles. Mientras disfrutamos de nuevo de las vistas que ofrece esta zona de Hong Kong.
Llegamos al Pier 5 y compramos los billetes para el ferry a la cercana isla de Cheung Chau. La idea es pasar allí la la mañana. En ferry ordinary, es decir, en el más sencillo el billete son 13,8HKD cada uno. Cuando zarpamos alucinamos con las vistas que hay desde el mar, con Kowloon a un lado y Hong Kong al otro 🙂
El barco tarda 55 minutos en llegar y mientras, observamos la cantidad de islas que conforman el país, todas ellas montañosas.
Puede que sea pequeña, pero la isla de Cheung Chau es uno de esos lugares que no deja indiferente… Sede del Festival anual de los Bollos, cuenta con bonitos templos, marisquerías, playas, e incluso un refugio de piratas.
Cuando llegamos a la isla, vemos que hay bastante turismo en la zona, sobretodo de hongkoneses. El muelle está abarrotado de barcos pesqueros. Y frente a él, hay una calle repleta de tiendas y restaurantes, dónde sobretodo sirven marisco.
Callejeamos y damos un paseo hasta la playa, en el otro extremo de la isla.
Nos quitamos las bambas, nos remangamos los tejanos y metemos los pies en el agua 🙂 ¡El agua está buenísima! Lástima no tener toalla y bañador. Con el calor que hace nos bañábamos bien a gusto… Aunque cuando vemos que hay una franja delimitada para evitar que tiburones se acerquen a la zona de baño, casi que nos alegramos de no tener el bañador 😛
Nos sentamos un rato en la arena hasta que se nos secan los pies para poder ponernos las bambas de nuevo, ¡se está de lujo aquí! Vaya acierto hacer esta escapada hoy…
Callejeamos un poco por el pueblo. Compramos un Aquarius por 10HKD, y vemos los dos templos más importantes que tiene la isla. El primero es el templo de Pak Tai, levantado por los habitantes de Cheung Chau hace 200 años en honor de Pak Tai, el Dios del Mar del Taoísmo. También recibe el título de Emperador Supremo del Cielo del Norte o del Cielo Misterioso.
La entrada es gratuita. Alberga artesanía de madera bañada en oro de la época de la dinastía Qing (1644-1911). Y una espada de hierro de la dinastía Song (960-1279). Cuenta con dos pequeños altares, y podemos disfrutar del lugar completamente a solas.
El segundo templo que visitamos es el de Kwan Kung. Situado en una pequeña colina en el centro de la isla es de construcción reciente (1973). Cuenta con una estatua del dios Kwan Kung elaborado a partir de una pieza entera de madera de alcanfor. El templo está bastante deteriorado, apenas cuenta con un pequeño altar actualmente y curiosamente, no dejan hacer fotos.
Volvemos al paseo marítimo y buscamos algún sitio para comer. Pero no nos convence ninguno. Hace mucho calor, no tienen aire y está plagado de moscas, y todos los restaurantes sirven marisco que a mi marido no le va nada. Así que decidimos coger el Fast Ferry que sale en 10 minutos y volver a HK.
Éste es bastante más rápido que el ordinary, y en 35 minutos estamos en el muelle cercano a Central.
Cogemos el metro hasta la parada de Jordan, y al llegar a la zona del hotel echamos un vistazo a los restaurantes que hay. Pero son más de las 15h y la mayoría están cerrados. Vamos a un combini y comprarnos comida preparada más unos refrescos (80HKD) y subimos a la habitación del hotel a comer.
Decidimos echarnos una siesta y descansar un poco, hoy el calor está apretando y se hace muy pesado estar en la calle.
Cuando nos despertamos, recogemos las cosas y empezamos a hacer las maletas. Sobre las 19.30h nos acercamos a Temple Street de nuevo a hacer unas compras que le hemos cogido el gustillo al regateo 😛 Os dejo una foto extraída de Wikipedia para que veais la famosa calle
Hoy arrasamos… compramos 5 monederos pequeños (120HKD) y otro más grande de imitación de Mulberry (110 HKD), una cartera de piel (70 HKD) y un pack de 5 imanes (35HKD). ¡Espero que no nos paren en la aduana porque vamos cargados! 😛
Se nota que se acerca diciembre y con ella la Navidad…, y que Hong Kong es un país consumista porque empezamos a ver decoración navideña por todas partes.
Sobre las 21h volvemos al hotel y decidimos subir a cenar a su restaurante. Pedimos 3 platos, uno de fideos, otro de soja con verduras y uno de ternera con verduras. Más unas bolitas rellenas de pasta dulce, y té (444HKD). ¡Cenamos de vicio y somos incapaces de terminarlo todo!
Tras la cena, volvemos a la habitación. Nos damos una ducha y a dormir… Mañana nos espera un largo viaje de regreso a casa 🙁