Hace tiempo que le doy vueltas a añadir uno de los preparativos de viaje que a veces más nos puede romper la cabeza. Y aprovechando que soy enfermera de profesión y viajera de pasión… pues, ¿qué tal si os cuento cómo preparar un botiquín de viaje? Aquí encontrarás qué imprescindibles debes llevar contigo y qué hay que saber sobre salud viajera… ¡¿Vamos a ello!?
Botiquín de viaje y salud viajera
Navegando por las redes, puedes encontrar muchísima información pero a veces, cuesta encontrarlo todo unificado y estructurado. Así que esa es mi intención. Ir explicando punto por punto, esas recomendaciones y datos imprescindibles que debemos tener en cuenta acerca de la salud viajera.
1. Sanidad en el país de destino
Conocer el estado del sistema sanitario y cómo está la sanidad para nosotros es uno de los factores más importantes a la hora de escoger destino. Quizá por deformación profesional, porque viajamos con bebé o porqué además yo tengo una enfermedad crónica que me afecta al sistema inmune, es algo que siempre valoramos. Y pienso que todos deberíamos echar un vistazo antes.
Saber si el sistema es público (como el nuestro), de copago (como Francia) o privado (como en EEUU o Japón), es importante. Nos puede ayudar a orientar cómo enfocar el viaje, las precauciones estándar y extras que debemos tener en cuenta y también a enfocar el tipo de seguro de viajes que necesitaremos. Nosotros siempre vistamos las web del Ministerio de Exteriores. Y también solemos echar un vistazo a las webs de los gobiernos americano y británico, a veces dan info más precisa.
2. Seguro de viaje
Es súper importante que cubra todos los gastos bien. Es por eso que es necesario saber a dónde estamos viajando y qué tipo de sanidad tiene. Hay países con una sanidad MUY cara. Y hay algunos que requieren traslados a otros países para que puedan atenderte en inglés. Conocemos amigos a los que llevar un buen seguro, les ha salvado. Como le ocurrió a mi amiga Vero de ViajarCode: Verónica en Japón.
Siempre buscamos un seguro que cubra la mayor cantidad de gastos posibles y a todos los miembros. Nos ocurrió en un viaje a París, que necesitamos a un pediatra y nuestra póliza sin saberlo, no lo incluía. ¡Así que atentos! Una cosa así, te puede echar por tierra un viaje como nos ocurrió a nosotros, que tuvimos que volver antes de tiempo y asumir nosotros los costes.
Desde entonces aprendimos la lección, y siempre viajamos con el seguro Heymondo. Disponéis de un 5% de descuento en las pólizas si contratáis a través de nuestro enlace 😉
Normalmente, también le añadimos la póliza de cancelación. Con Heymondo, no es necesario contratarla como máximo 7 días después de contratar el viaje, ¡tienes tiempo de sobras para ello!
3. Servició de Atención al Viajero Internacional
Dependiendo del país, será imprescindible vacunarse o hacer profilaxis de algunas enfermedades como la Malaria. Por eso, es importante pedir cita con tiempo si tuvieran que poneros más de una dosis de alguna vacuna. También os proporcionarán información sobre prevención de enfermedades en el destino.
No os pongo referencias porque cada ciudad tiene su punto/s de Atención. Normalmente, están adscritos a Hospitales o Centros grandes de Atención Primaria. Buscad en Google y os dirá cuál es el más cercano a vuestro domicilio. Algunos centros, también cuentan con aplicaciones móviles y webs con mucha información.
4. Si tienes enfermedades crónicas
Es súper importante que hables con tu médico de familia o especialista para que esté informado y pueda decirte si debes tener en cuenta alguna cosa específica. Siempre recomiendo llevar tu medicación encima y no facturarla. Así que dependiendo de los días de viaje, quizá necesites que el médico te haga una receta extra por si tienes que comprar más medicación de la habitual. También es importante que nos aseguraremos que no hay contraindicaciones y es súper importante, llevar una informe en inglés.
Además, revisa normativa del país en cuanto a fármacos. Hay muchos países que tienen restricciones para entrar opioides o derivados, inyectables, epinefrina, etc. Y a veces, como me pasó en el 2º viaje a Japón, tienes que pedir autorización para entrar los medicamentos que necesitaba.
Las compañías aéreas no suelen poner pegas y a veces incluso, pueden guardarte la medicación en nevera durante el vuelo.
Recuerda que todo debe ir bien identificado. Se recomienda llevar las cajas enteras con sus prospectos (y no los blísters sueltos), y llevar la receta encima junto al informe. Os recomiendo que la llevéis en papel y en formato electrónico. En algunas aduanas te pueden pedir que se la muestres.
5. Botiquín
Aquí entra en juego el sentido común. Dependiendo del destino, deberás cargar más material o menos. No es lo mismo ir a un Safari, a un país subdesarrollado o de expedición montañera, que a un viaje por España o Europa. Las posibilidades de encontrar material y medicamentos no serán las mismas. De todos modos, con el peque siempre llevo un mini botiquín con material y medicamentos básicos, aunque vaya de excursión cerca de casa. ¡Con ellos nunca se sabe! Y también llevo mi medicación básica allá dónde voy por el hecho de tener una enfermedad crónica.
Este apartado lo dividiré en 3 secciones para ayudaros a organizaros mejor, y describiré todos los básicos a llevar. Luego ya, dependiendo del destino y de la época del año, necesitaréis unas cosas u otras.
a) Material básico curas:
Gasas estériles, apósitos de varios tamaños/tiritas, esparadrapo, desinfectante (clorhexidina alcohólica y/o povidona yodada), pinzas y tijeras de punta roma. Con estos dos últimos, podéis tener problemas para llevarlos en el equipaje de mano, así que mejor facturarlos. También llevamos apósitos de segunda piel para las ampollas y puntos sin tejer tipo Steri-Strip®. Una venda de crepé por si hubiera que hacer un vendaje compresivo, y una manta térmica plegable.
Con el peque, también llevamos un termómetro. Esto es algo que añadimos al comenzar los viajes de tres porque nosotros nos notamos la fiebre en seguida, pero con el peque es más difícil a veces.
b) Medicamentos:
Los medicamentos básicos de uso más frecuente que es interesante llevar encima son paracetamol, antiinflamatorios, antihistamínicos, suero oral y antidiarreicos. Recordad que en algunos lugares será fácil encontrar estos medicamentos en cualquier farmacia o combini. Como pudimos ver en Indonesia.
Aquí hago dos altos. Uno con los antiinflamatorios. Tened en cuenta que si tenéis fiebre en un país con riesgo de dengue, es súper importante evitar tomar ibuprofeno o AAS (Aspirina®), ya que podríais sufrir una hemorragia. En esos casos, siempre acudid o urgencias y/o contactad con vuestro seguro. Y dos, con los antidiarreicos. El más conocido es el Fortasec® pero a veces es importante poder expulsar la bacteria que os está provocando la diarrea y es más conveniente tomar un fármaco que os frene las deposiciones pero no que os las corte del todo. Ante cualquier duda, contactad con el médico del seguro.
Como ya he dicho, llevar la medicación crónica para toda la estancia (y procurar llevarla en equipaje de mano) si es necesario. Y de nuevo, si vuestro médico lo considera, es posible que os deje una receta de antibiótico por si lo necesitárais, con las instrucciones de cómo y cuándo tomarlo. A mi esto me salvó en China, dónde se me infectó un pequeño quiste de la espalda… no sé cómo le hubiera explicado a un chino lo que me pasaba de no haber llevado un antibiótico encima…
Y según el tipo de viaje que hagas, quizá necesites llevar biodramina o un antimalárico.
Tened en cuenta si se es alérgico a alguna cosa… en esos casos, lleva siempre encima un kit básico de reacción alérgica y todas tus alergias anotadas en el idioma del destino.
Y si vas con peques, recuerda hablar con la pediatra y llevar los mismos medicamentos que para los adultos, pero en dosis pediátricas 😉
c) Otros:
Importante llevar ropa y calzado adecuados al destino y a la temperatura del mismo. En algunas zonas de baño, se recomienda usar escarpines para evitar picaduras, heridas y lesiones por erizos. Según el destino, llevad repelentes y pomada para las picaduras. Valorar si es necesario impregnar la ropa en permetrina o llevar una mosquitera. También, según la época del año y el destino, será importante llevar protector solar +50 y protector labial. Esto no es solo para el sol, también para destinos con nieve o que haga mucho frío. También valorad llevar bolsas calientes para botas y bolsillos. Y si es necesario potabilizar el agua en caso de dudas sobre su potabilidad o trekkings. Recomendable llevar toallitas para limpiar las manos y/o gel hidroalcohólico.
Ahora que el COVID nos acompaña, es interesante llevar un test de antígenos (pueden ser muy caros en algunos países y te sacará de dudas). Y alguna mascarilla por si hiciera falta.
Con el peque además, siempre llevo una pomada de árnica para los golpes. Y si usas gafas y/o lentillas ,lleva un repuesto y líquido para las lentillas.
6. Viajar con niños
Aunque ya os he ido contando algunos tipos, sólo recordaros que en el control del aeropuerto deberás mostrar los jarabes, los biberones y los potitos, yogures o zumos que puedas llevar para ellos. En muchos aeropuertos, encontrarás zonas para familias en los controles de seguridad. Aquí el personal está más habituado a las necesidades de los peques en los equipajes de manos y son más ágiles en el proceso de revisión.
Tened cuidado con los repelentes insectos ya que algunos sólo se pueden usar a partir del año/2 años.
En caso de que el peque sea tiquismiquis con las comidas, puedes facturarle alimentos o llevar algunas cosas en el equipaje de mano.
En la mayoría de destinos, encontrarás pañales, toallitas, leche y cereales en los supermercados. Nosotros lo que hacíamos era llevar para pasar los primeros días, y luego comprar en destino lo que nos faltara.
7. Recomendaciones generales sobre salud viajera y algunas consideraciones adicionales
Aunque las hayamos escuchado por activa y por pasiva, dejadme hacer un breve recordatorio.
En la mayoría de destinos, se recomienda beber agua embotellada, evitar hielos y zumos naturales o frutas peladas. Cuidado con usar agua no tratada para lavarse los dientes porque algo se ingiere. Mejor lavarlos con agua embotellada.
Tomad los alimentos bien cocinados excepto un buen sushi en Japón 😛 Y cuidado con los puestos callejeros ya que en la mayoría de países, las medidas básicas de higiene brillan por su esencia. Aquí sobretodo, evitad alimentos con huevo crudo o poco cocinado.
Tened en cuenta que algunos fármacos pueden cambiar de nombre según el país. Por ejemplo, el paracetamol en países como EEUU o Japón, se llama acetaminofén. En algunos combini/farmacias se pueden comprar fármacos como paracetamol, vitaminas, suero oral pero en otros, son mucho más restrictivos. En EEUU por ejemplo, puedes conseguir ibuprofeno de 200mg en cualquier tienda, pero vigilad en la aduana con algunos fármacos como os decía en el punto 4.
¡Cuidado con la anticoncepción! No en todos los países es posible encontrar anticonceptivos. Por ello, llevad siempre los vuestros. En algunos países además, la calidad de los preservativos es muy dudosa. Así que tened cuidado con la prevención de las ITS y del embarazo. A veces es mejor echar unos cuantos preservativos en la maleta y llevarlos de casa. Cuidado también con los tatuajes y la seguridad del lugar dónde os lo hagáis.
Vigilad con el mal de altura, los golpes de calor y/o los cambios bruscos de temperatura/humedad. Podéis llegar a pasar un mal rato.
Antes de bañaros en el mar, lagos o ríos, aseguraros que es seguro. Puede haber medusas u otros animales venenosos. Y evitad los baños en agua dulce estancada o que pueda tener excrementos de animales.
Algunas enfermedades tropicales como el zika, el dengue o intoxicaciones gastrointestinales, se manifiestan con el tiempo después del regreso. Si acudes al médico por una infección o proceso inflamatorio tras un viaje a zonas de riesgo, informarle de los viajes de los últimos 12 meses. A mi me pasó con el viaje a Indonesia. Me intoxiqué en el avión de ida y dos meses después del viaje, seguía con problemas intestinales. Fui al médico, le expliqué dónde había estado y me dio antibiótico. En una semana estaba recuperada 😉
Revisad la cama y los zapatos en determinados lugares para evitar picaduras/mordeduras. Atención también a las pulgas/chinches porque te las puedes traer a casa y cuesta muchísimo deshacerse de ellas. A veces puedes encontrar escorpiones dónde menos te lo esperas, ¡¡como me pasó con el último viaje a Menorca!!
Si tienes tendencia al estreñimiento, lleva siempre laxantes. Si tienes el estómago delicado, acuérdate de añadir algún protector gástrico al botiquín. Y si tienes tendencia al insomnio o para ayudar a minimizar el jet lag, puedes usar la melatonina. Es un somnífero natural (nosotros producimos melatonina para inducir al sueño de manera natural) que pueden tomar niños y mayores sin ningún problema.
Como os decía antes, si viajas ligero de equipaje, es mejor priorizar los medicamentos que puedan ser difíciles de encontrar frente a otros productos que en un momento dado, podemos encontrar fácilmente. Y no está de más, llevar información de hospitales y centros sanitarios cercanos en destino (teléfonos y dirección), así como de la embajada o consulado.
8. ¿Quieres verme explicándolo todo?
Y por último, si os apetecer verme explicándolo todo, no os perdáis la colaboración que hice en el programa de Radio Castellar, Stories de Viajes junto a Carlos Lecegui, Verónica Paz (Viajar code: Verónica) y Gloria Ribas (La Maleta de Glo). Podéis escuchar el podcast en Spotify o vernos en Youtube.
En su Instagram, también encontrarás un anticipo del programa y las risas que nos echamos 🙂
Espero que esta entrada, a pesar de haber quedado larga, os sirva de ayuda para preparar vuestros viajes. Recordad siempre que la clave está en la prevención y en ponerle sentido común. Y no hagas por ahí, lo que no harías en casa 😉
Cualquier duda adicional, puedes escribirme un mail o dejar un comentario. Estaré encantada de poder ayudar 😉
Nota: esta entrada no está promocionada ni pagada por ninguna marca comercial ni compañía de seguros. Está basada en mi conocimiento como enfermera desde hace más de 18 años y toda mi experiencia viajera.